Cinco ciudadanos colombianos y uno panameño fueron detenido por el tráfico ilegal de al menos 28 migrantes en dos operaciones desarrolladas en la provincia panameña de Darién, fronteriza con Colombia, informaron este martes las autoridades.
El comisionado del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), Rolando Briz, dijo en una conferencia de prensa que tres ciudadanos colombianos fueron aprehendidos el lunes cuando traficaban a una familia haitiana de seis miembros, y otros dos el pasado 15 de enero cuando llevaban 22 migrantes, la mayoría africanos.
En estas acciones también fue detenido un ciudadano panameño, que se entregó voluntariamente a las autoridades después de que los migrantes lo identificaron como un traficante y le acusaron de haberles robado, de acuerdo con la información oficial.
"Estos traficantes de seres humanos pertenecen a una red que se forma producto de la necesidad de las personas que tratan de emigrar. Aparte de cobrarles, suelen robarles en el camino a veces les dejan sin nada completamente desorientados", declaró Briz.
Agregó que los migrantes fueron puestos "bajo órdenes de los servicios de Migración panameños como víctimas", y los casos de los presuntos pasados a las autoridades judiciales correspondientes.
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UN FLUJO CONTROLADO LENTO EN PANAMÁ POR RESTRICCIONES EN MEXICO, NICARAGUA Y COSTA RICA
Panamá aplica un programa llamado "flujo controlado" que busca precisar la identidad, antecedentes judiciales y estado de salud básico de los migrantes irregulares, que entran al país por la selva del Darién, la peligrosa frontera natural con Colombia.
El comisionado Briz precisó a Efe este martes que actualmente hay en Panamá 1.263 migrantes irregulares en tránsito, de los cuales 787 se encuentran en albergues en la provincia de Darién y 476 en Los Planes de Gualaca, cerca de la frontera con Costa Rica.
La mayoría son africanos, aunque también hay alrededor de 60 cubanos, y todos tiene el objetivo de llegar a Norteamérica, dijo el comisionado, aunque señaló que las restricciones de paso impuestas por México, Nicaragua y Costa Rica está ralentizando su salida de Panamá.
"El flujo controlado está siendo (afectado) por las acciones otros de países como México y Nicaragua, que están cerrando la frontera, y el paso se nos dificulta a través de Costa Rica que ha minimizado la cantidad de migrantes que pueden pasar por Paso Canoas", dijo Briz en la conferencia de prensa.
Por ello, añadió, los más de 1.200 migrantes en tránsito en Panamá "no han podido pasa por Paso Canoas. Dificultan las acciones de flujo controlado las acciones que toman países hermanos", agregó.
Ya entre finales de 2015 e inicios de 2016 la decisión de Nicaragua de cerrar su frontera generó una crisis humanitaria en las fronteras de Panamá y Costa Rica, donde se aglomeraron miles de cubanos que buscan llegar a Estados Unidos.
Ello, ante la perspectiva de que el deshielo de las relaciones entre Washington y La Habana acabaría con las ventajas migratorias de las que gozaban los cubanos en Estados Unidos, lo que finalmente ocurrió.